Pues uno más de la saga,
y esto me pone bastante triste porque significa que solo me queda uno L para terminarla… he disfrutado TANTO estos
libros! De verdad que están escritos magníficamente! Y me han encantado! Que sigo
buscando por la red más libros de esta increíble autora… es una forma tan
sencilla de aprender historia! De hecho les tengo que presumir que el otro día
entré en un debate con unos compañeros abogados y fue súper gracioso porque les
conté toda la historia de Juan sin tierra cuando ellos pensaban que él se
llamaba así por los tratados que había firmado… y yo supe contarles toda la
historia jajaja fue muy gracioso porque no me creían y corrieron a buscar una biografía
y se dieron cuenta que lo que les conté era cierto jajaja
He tenido algunos
problemas con mi reader… se me anda rebelando mucho y eso me pone muy triste…
por eso perdí los bookmarks de este libro L así es que los dejaré con el escrito del prologo… pero eso si! Les aseguro
que es una pequeña joya este libro... y me dejo diciendo varias veces “pinches
viejas… todo queremos jaja”
El conde de Provenza tuvo cuatro hijas. Todas hermosas pero pobres, sin
dote. La suerte permitió que la mayor, Margarita, se casara con el rey
de Francia. Leonor, la más hermosa de todas, estaba decidida a no ser
menos. Ella no descansó hasta lograr casarse con Enrique, rey de
Inglaterra.
Tan pronto Enrique se casó con la muchacha que vino de Provenza, se convirtió en su esclavo. Su única alegría era colmarla de regalos. Ello condujo a aumentar los impuestos y provocar el odio y la rebelión de los súbditos. Simón de Montfort encabezó la revuelta, se enamoró de la hermana del rey y se casó secretamente con ella.
A través de todos estos turbulentos años Enrique fue sostenido por el amor de su familia y, por sobre todo, de su reina. Leonor consiguió dominar a su familia y, por su intermedio, al país. La pobre muchacha que vino de Provenza se mantuvo firme junto al rey, incluso en los peores momentos, lo hizo un hombre feliz, a pesar de que casi lo hacer perder la corona.
Tan pronto Enrique se casó con la muchacha que vino de Provenza, se convirtió en su esclavo. Su única alegría era colmarla de regalos. Ello condujo a aumentar los impuestos y provocar el odio y la rebelión de los súbditos. Simón de Montfort encabezó la revuelta, se enamoró de la hermana del rey y se casó secretamente con ella.
A través de todos estos turbulentos años Enrique fue sostenido por el amor de su familia y, por sobre todo, de su reina. Leonor consiguió dominar a su familia y, por su intermedio, al país. La pobre muchacha que vino de Provenza se mantuvo firme junto al rey, incluso en los peores momentos, lo hizo un hombre feliz, a pesar de que casi lo hacer perder la corona.